Por primera vez, la Procuraduría de Justicia del Estado ordenó y ejecutó la destrucción de narcóticos en Nuevo León.
Aunque esta actividad siempre era realizada por la autoridad federal, ahora funcionarios del Gobierno del Estado efectuaron la incineración en la sede de Fuerza Civil ubicada en el municipio de Escobedo.
El procurador de Justicia, Bernardo González Garza; el gobernador, Jaime Rodríguez Calderón; y Arturo González García, secretario de Seguridad Pública, destruyeron 130 kilos de mariguana, 926 gramos de cocaína en piedra y 1.4 kilos de cocaína en polvo, entre otros estupefacientes.
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La incineración de narcóticos decomisados se realizó en el Campo Policial No. 1 de Fuerza Civil, sobre la carretera Monterrey-Nuevo Laredo.
El procurador dijo que atrás quedaron las pugnas policiales por la detención de delincuentes, y señaló que todas las autoridades de todos los niveles se necesitan unos con otros.
Antes de la incineración se realizó una muestra de análisis químicos, por parte de la especialista y perito Alejandra Versosa, a un indicio para confirmar que se trata de droga; este procedimiento se realiza para la detección de mariguana.
Bernardo González informó que se han decomisado 2 toneladas de mariguana en los cateos entre el último trimestre de 2016 y los primeros meses de 2017.
