El presidente municipal de Chilapa, Jesús Parra García reconoció que en dicha demarcación hace falta hacer aún más para detener la violencia, que solo el domingo cobró la vida de tres personas más.
Parra García reconoció que la tarde del domingo, justo frente a la central de autobuses se generó una balacera que dejó el saldo inicial de dos hombres muertos, el tercero falleció cuando se le trasladaba hacia Chilpancingo.
Reconoció que la contingencia constante que se vive en materia de inseguridad, hace necesario que se mantenga la comunicación permanente con el estado y la federación.
Pese a todo lo que ha sucedido, indicó que hasta el momento, personalmente no ha recibido ningún acto de presión por parte de los grupos que se disputan el control de la ciudad; Rojos y Ardillos.
Por esa razón, aseguró que no cuenta con un equipo especial de seguridad, ya que es un nativo de Chilapa con un arraigo muy fuerte entre la población.
Lamentó el asesinato de Bernardo Carreto, activista del colectivo integrado por familiares y amigos de personas desaparecidas en mayo pasado, cuando al menos 300 civiles armados tomaron el control de Chilapa durante cinco días.
"Creo que lo emboscaron, era activista y estaba siendo atendido junto con sus compañeros, tanto el municipio como el estado lo habíamos apoyado lo más que se ha podido", indicó.
Reconoció que el problema de inseguridad en Chilapa es reflejo de la problemática que se arrastra en todo el país, aunque para el caso de su municipio, ya es necesario hacer unos ajustes a la estrategia que se implementa, porque se tiene muy claro que la violencia prevalece.
"Las autoridades federales tendrán que modificar su planteamiento porque no es el caso de Chilapa, esto se vive en varios municipios de Guerrero y de otras partes del país; el gobierno federal debe analizar y ver", aseguró.
En los meses que lleva en la alcaldía, dijo que no ha tenido información relacionada con la comisión de un secuestro.
Aseguró que la población está trabajando, que trata de regresar a la normalidad pese a todas las dificultades, prueba de ello es que las escuelas trabajaron con normalidad hasta el día en que comenzó el periodo vacacional decembrino.
En donde sí admitió problemas es en el sector salud, pues hay unidades médicas que carecen de personal, equipo y medicamentos.
De las 31 casas de salud que tiene la zona rural de Chilapa, más de 10 ubicadas en la Montaña baja no tiene la cobertura profesional correspondiente.
