Durante el fin de semana el Instituto Nacional de Migración (INM) detuvo a 89 personas no nacidas en México que pretendían llegar al norte del país para cruzar la frontera con Estados Unidos, ya que no pudieron comprobar su estancia legal cuando cruzaban la autopista México-Puebla.
Ambos operativos, en los que también participaron elementos de la Guardia Nacional (GN) y el Ejército, ocurrieron en inmediaciones de la autopista México-Puebla, a la altura de la caseta de cobro de San Martín Texmelucan, con rumbo al Arco Norte.
La primera revisión tuvo como involucrado un autobús de la marca Scania que pretendía llegar a Monterrey; sin embargo, fue retenido cuando se identificó en su interior a 45 migrantes provenientes de Venezuela, Honduras, Ecuador, República Dominicana, Mauritania, El Salvador, Senegal y Guinea.
El segundo operativo tuvo por objeto un autobús turístico de la agencia Bustur, unidad 17726 y placas de circulación 328-RR-4, el cual salió desde Tapachula, Chiapas, para arribar a Tijuana, en Baja California, pero le fue impedido continuar su recorrido cuando se encontró entre los pasajeros a ciudadanos de Honduras, Haití, El Salvador y Guatemala que no pudieron comprobar su estancia legal en el país.
En ambos casos los extranjeros fueron trasladados a la estación del INM en San Pablo Apetatitlán, en Tlaxcala, en espera de que se resuelva su situación migratoria para ser deportados a su país de origen.
En cambio, los conductores de las unidades de transporte quedaron a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR) ante su probable responsabilidad en el delito de tráfico ilegal de personas en calidad de migrantes.
CHM
