Ante los ataques registrados el jueves en los límites entre Coahuila y Nuevo León, las corporaciones de seguridad desplegaron un operativo especial y permanente en la zona norte del estado, con el objetivo de reforzar la vigilancia y contener los actos de violencia registrados.
La Secretaría de Seguridad Pública, la Fiscalía General del Estado, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Marina mapearon las brechas colindantes con Nuevo León y duplicaron la presencia de sus elementos en la región, priorizando los puntos considerados de mayor riesgo.

En el municipio de Hidalgo, decenas de policías y militares aumentaron su presencia con el apoyo de drones, unidades blindadas, vehículos todo terreno e internet satelital, herramientas que permiten ampliar el monitoreo en áreas de difícil acceso. Uno de los puntos más vigilados es la llamada “zona cero” del primer ataque, localizada a unos diez kilómetros de la carretera ribereña, en la brecha conocida como “El Callejón”, donde ocurrió la agresión contra elementos del Ejército.
Refuerzo con coordinación interinstitucional
Los agentes han sido desplegados en caminos, brechas e inmensos ranchos cinegéticos, zonas que, de acuerdo con las autoridades, han sido utilizadas para ocultarse o evadir los operativos.
En este refuerzo, ha sido clave la coordinación entre las instituciones, que mantienen un despliegue operativo tanto de día como de noche. Las fuerzas de seguridad en Coahuila insisten en bloquear el paso de los grupos criminales que intentan establecerse en territorio estatal.
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