Los choferes de la ruta Santa Elena-Moralillo-Tampico, que la habilitaron para atender la necesidad de gente que va y viene desde Veracruz a Tamaulipas, hacen rampa en la calle Pedro J. Méndez, casi esquina con Antonio Matienzo.
Muere chofer de la ruta Santa Elena-Moralillo-Tampico
En el vidrio trasero, las unidades acomodadas en fila, con orden de unidades militares, tienen el su vidrio trasero la frase “Que en paz descanse Chalío”, su compañero, que la noche de este martes murió en una volcadura en la carretera Tampico-Valles, aproximadamente 150 metros del faro de la colonia Morelos.
En la carpeta asfáltica de la carretera Tampico-Valles, en el sitio donde se registró una volcadura y murió el conductor de una unidad de transporte, quedó solamente una mancha de sangre, junto a dos veladoras y un juego de llaves.
Ismael García, uno de los compañeros de Chalío, aseguró que se trata de un accidente que sumó a sus compañeros, pero que también evidenció algunas necesidades en dicha rúa, la cual es utilizada por transporte de carga, de transporte público y particulares.

“Hace falta una limpieza por donde está la zona de transferencia de basura, ahí por donde está la planta de agua, porque hay algunos baches que descontrolan, sobre todo más de noche, además de un semáforo ahí donde pasan los tráilers, porque hay muchos accidentes”, declaró.
“Fallan las lámparas, porque hay de esas modernas, pero algunas prenden pero otras están apagadas”, aseguró el trabajador del volante, una exigencia a la cual se les sumó otro compañero.
Miguel Alberto Monroy, otro de los compañeros de Chalío, coincidió en que “hace falta mucho la iluminación porque en la noche y en la mañana muy temprano está muy oscuro, así que la gente pasa todo el tiempo”.
Piden mejoramiento de la carretera Tampico-Valles
En ese tramo de dicha carretera federal, que conecta a Tamaulipas con Veracruz y San Luis Potosí, tiene algunas deficiencias que complican la conducción, lo demuestran las muertes por volcaduras y atropellamientos.

Mejor dicho, lo demuestran las cruces incrustadas a la orilla de la carretera o en el camellón, que en menos de 100 metros hay hasta 8, algunas con fallecimientos desde el 2019 y otras más recientes. Son pequeños templos urbanos, aderezados de tragedia.
Los choferes que transitan por dicha carretera, así como los vecinos de la colonia Morelos, cercana a la Tampico-Valles, refieren que la necesidad es de tapar los baches, mejorar el alumbrado porque es una zona oscura, colocar más señalética, boyas y tal vez, aunque no lo refieren... más vigilancia.
SJHN