El músico Javier Bátiz ofreció un concierto gratuito en el Zócalo capitalino, ante miles de personas y con invitados que rememoraron la nostalgia del rock, como Eugenia León y Dr. Shenka.
Aproximadamente a las 17:45 el actor César Bono abrió el concierto con unas palabras hacia el guitarrista y reconoció su trayectoria musical, para comenzar el concierto con la canción “Caminata”, momento en que el público gritó y coreó la melodía al ritmo de la orquesta sinfónica que acompañó al roquero.
La presentación, organizada por el Gobierno de la CdMx, fue también para celebrar los 60 años de trayectoria del guitarrista.
Bátiz tuvo durante sus presentación a personalidades, además de León y Dr. Shenka, de Panteón Rococó, a Tony Lira, Claudia Madrid en la batería, Rosalía León en guitarra acústica y quien lo acompañó con su voz.
Tras interpretar temas representativos de su repertorio como “I Have Been Loving You so Long”, “Tierra de nadie”, “La montaña”, “Si estuvieras aquí”, el veterano cantante tomó el micrófono y comentó: “Me siento muy feliz porque es mi país, aquí el águila, allá abajo están todos los mexicanos y viva México, viva México por todo lo grandioso que es el pueblo.
“Estoy muy agradecido con ustedes, el público, muchas, muchas gracias”, y abrió los brazos hacia su grupo de músicos, recorriendo el escenario.
Porteriormente salió de escena y regresó en tono de broma para expresar: “Me acaban de avisar que nos vamos a seguir hasta las 6 de la mañana del domingo, y todos sin ropa”, momento en el que el público soltó la carcajada y aplaudió al cantante.
Además agradeció la presencia de su amigo Pocholo, quien estaba en primera fila, apreciando el espectáculo, argumentando que son grandes amigos desde hace ya varias décadas.
Dos bailarinas vistieron la tarima montada en la plancha del Zócalo a espaldas del Palacio Nacional, además de una pantalla gigante detrás de los músicos.
Tras “La chancla”, “La de los ojos grandes”, “Pacífico jardín” y “El vuelo del ángel”, con poco más de dos horas de repertorio musical, Bátiz se despidió de su audiencia con el aplauso de la orquesta, su público y la gran ovación de los presentes.
Al finalizar el concierto, Bátiz bajó del escenario para tomarse fotos y autografiar algunos discos y guitarras, momento que muchos de sus seguidores esperaron durante años para obtener la firma de uno de sus ídolos, tal y como lo mencionaron muchos de ellos, quienes lucieron una gran sonrisa.
CLAVES
TODA UNA LEYENDA
El guitarrista de Tijuana es considerado uno de los precursores del rock en nuestro país.
Sustituyó a Johnny Laboriel en Los Rebeldes del Rock, pero su estilo no le permitió continuar con la banda.
Se le conoce como el maestro del guitarrista jalisciense Carlos Santana.