Afortunados en la música, desafortunados en otras disciplinas, así se aceptan los miembros de Enjambre, quienes dado el poco éxito que tuvieron con los deportes, la escuela y las novias encontraron su razón de ser en los escenarios.
Con 10 años de trayectoria, la banda conformada por los hermanos Luis Humberto, Rafael y Julián Navejas, Ángel Sánchez y Javier Mejía regresó a los escenarios con dos presentaciones en el Teatro Metropólitan, el primero ayer y el segundo hoy, donde presentan Imperfecto Extraño, su más reciente álbum.
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En conferencia de prensa compartieron experiencias de sus inicios y enviaron un mensaje de motivación a los jóvenes que quieren hacer música.
"Cualquier persona que quiere hacer una banda, componer y subirse a un escenario a interpretar su música, es alguien a quien admiro mucho. Estamos en la punta del iceberg de algo muy grande, hace unos años no existían tantos espacios para propuestas de música rock y ha crecido de manera acelerada", declaró Luis Humberto.
"Es un buen momento y los exhortaría a que sigan proponiendo música... Esto no está peleado con tener seriedad y aprender a tocar y cantar bien, pero el consejo es que no esperen a ser millonarios o famosos para iniciar sus sueños, se trata de compartir con amigos, si puedes tener un público será la mayor recompensa", agregó.
Para la banda es importante dar a la juventud un mensaje de superación, y desde su experiencia los impulsan a probar suerte adueñándose de un instrumento y con creatividad.
"Porque es mejor que hagan una banda a que anden gastándose el dinero de sus papás en el antro. Que mejor se junten con sus cuates a componer rolas, si no la hicieron en el deporte, a lo mejor la hacen en la música.
"Nosotros nos la hemos pasado muy bien, solo puedo decir que esto se trata de pasarla chido y deberían seguir en busca de proveer algo creativo, hecho en equipo, en amistad, y presentarlo ante un público para ver hasta dónde llega", dijo Navejas.
ES