América se aferra a la Leagues Cup rescatando el empate en los últimos minutos

América se aferra con las uñas a la Leagues Cup, cuando parecía estar contra las cuerdas y a punto de quedar eliminado pudo rescatar el duelo contra el Minnesota.

Las Águilas son un flan a nivel defensivo, pero con orgullo lograron el empate 3-3 y llevaron el juego hasta los penales, donde -ahora sí- tuvieron mucha determinación para llevarse el punto extra. Su futuro sigue en el aire, pero al menos logró un respiro.

En el día que América se jugaba a cara o cruz su futuro en la Leagues Cup; Jardine mandó un equipo de corte ofensivo, con un mensaje claro de salir a atacar, con la enésima oportunidad para Víctor Dávila y con la titularidad para Henry en el eje del ataque. En el día del juicio se tenía que contar con el capitán.

Sin embargo, el presente de América no es el mejor, está muy lejos de lo que se espera en todas las facetas del juego, tanto en la defensa, como en la creación y la definición. En ese cuadro de Coapa que fue tricampeón había una compensación de las mismas y hoy no se tienen.

Las Águilas tienen la pelota, pero no trascienden con ella, y en defensa sufre de lo lindo. Con poco, Minnesota se puso en ventaja cuando montó una transición rápida, un pase filtrado rompió a la defensa, Reyes no cortó y Lichnovsky perdió en el cuerpo a cuerpo con Oluwaseyi, quien venció a Malagón al cuarto de hora.

Reacción y flaqueza

Apretó los dientes el cuadro azulcrema, que tuvo la pelota, pero su posesión era estéril, los estadunidenses replegaron y aguantaron a la contra, cerraron espacios y los de Coapa carecían de chispa; hasta que la fortuna le concedió una. Un centro de Fidalgo fue desviado, la pelota hizo una parábola y Boxall estuvo más pendiente de bloquear a Zúñiga, el balón le golpeó la cabeza y batió a su portero para el empate americanista al 27’.

Parecía una vuelta a empezar, pero no fue así, porque salió la fragilidad defensiva de las Águilas, otra vez los conceptos de marca se fueron a la basura y Pereyra asistió a Hlongwane que solo tuvo que empujarla al 31’.

​Caos total

No, América no encontró la fórmula para crear peligro. Para el segundo tiempo se fueron Fidalgo y Kevin (de pésimo juego) entraron Brian y Violante, más juego ofensivo para buscar una reacción, el tema es que las Águilas son un equipo muy descompensado y con un bajón emocional.

Malagón salvó el tercero, y después hubo un esbozo de mejora. Zendejas colgó la pelota en el área y Zúñiga (de lo mejor de los azulcrema) se elevó para rematar con la cabeza y volvió a empatar el juego. La Pantera le daba vida a las Águilas.

Pero si algo ha mostrado este América es una gran capacidad para sabotearse, fue incapaz de corregir en defensa, cuando todo apuntaba a que vendría un arrebato de los de Jardine, lo que llegó fue el tercero en contra.

Igor se fue expulsado por doble amarilla. Nadie pudo alejar una pelota que amenazó el área y un tiro machucado de Pereyra le cayó a Harvey, quien estuvo solo, sin una mosca que le hiciera sombra, el panameño le pegó raso cruzado con la derecha, Malagón llegó, pero se le fue por abajo del brazo el balón y los estadunidenses ponían contra las cuerdas al Club América al 65’.

A sacar el ábaco

Fue hasta el cierre del partido cuando afloró el orgullo azulcrema. A la salida de un córner Brian encontró a Cáceres y éste cabeceó para poner el empate justo en el 90’. Incluso pudo ganar el juego en una contra en la que Aguirre remató, pero el portero St. Clair evitó la remontada. Y el final fue cardiaco con una doble atajada de Malagón que salvó la derrota.

En la ruleta de los penales, los tiradores de América mostraron convicción y determinación ocho lanzamientos perfectos que se conjuntaron con el tiro que Malagón le detuvo al argentino Nicolás Romero para darle el punto extra a las Águilas.

América sigue con vida en la Leagues Cup, pero su margen de maniobra es corto, deberá vencer a Portland por un buen margen de goles y esperar algún tropiezo de los equipos que están arriba en la clasificación, a sacar el ábaco y el rosario.

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