Durante un entrenamiento del Bayern Leverkusen este viernes dos compañeros del atacante mexicano, Karim Ballarabi y Roberto Hilbert estuvieron a punto de llegar a los golpes.
Los compañeros de campo de Javier Hernández tuvieron que ser apartado uno del otro por diversos miembros del plantel alemán para evitar que el problema pasara a mayores.
El dirigente de las aspirinas, Roger Shimdt, tuvo que enviar a Hilbert a los vestidores donde explicó que tuvo una opinión distinta con su compañero Bellarabi, el cual se puso un tanto violento.
Durante un partido de la Champions League del Bayer Leverkusen ante el Barcelona, el delantero mexicano se hizo de palabras con Bellarabi por una pequeña diferencia que tuvieron. Tiempo después Javier Hernández pidió disculpas por la actitud que tomó con su compañero.