Grandeza, el más reciente libro del ex presidente Andrés Manuel López Obrador, agarró desprevenidos a lectores e incluso a los empleados del stand de Planeta en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, que esperaban su lanzamiento hasta este viernes 5 de diciembre, pero se adelantó un día.
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¿Cómo está conformado Grandeza?
Con 632 páginas, divididas en dos secciones: I. Origen y destino de las civilizaciones y II. Grandeza indígenas, 10 capítulos, los seis primeros desde el origen del universo hasta la historia del cristianismo, que ocupan una cuarta parte del volumen (160 páginas) y los cuatro restantes enfocados a la historia americana desde la llegada del homo sapiens al continente hasta la actualidad, pasando por la Colonia.
“Todo el repaso histórico que hemos hecho sobre la vida y las civilizaciones del mundo ha tenido el propósito de esclarecer lo importantes que ha sido la preservación de los valores culturales que heredamos del México prehispánico. Ese legado, repito es lo que nos ha dado identidad, creatividad, fortaleza, humildad y humanismo para prosperar, ser felices y salir adelante frente a las adversidades”, escribe en el último de los 10 capítulos, Resurrección y legado, el político que se retiró a su rancho.
El grueso volumen, que si tuviera el formato tradicional de libro podría haberse engrosado con el doble de páginas, sólo de notas bibliográficas y referenciales tiene 30, llegó el jueves a la FIL, según algunas versiones, con 200 ejemplares, que se vendieron bien el primer día, pero para el mediodía del viernes la novedad ya no generó expectación ni se veía a gente adquiriéndolo en el espacio de Planeta en la FIL.
Una guía de lecturas de AMLO
Grandeza puede verse como una guía de las lecturas que le interesan al popular ex jefe de Gobierno de Ciudad de México (2000-2005) y ex presidente de la república (2018-2024). Hay autores y libros en los que se apoya para sus disertaciones, desde reputados historiadores y arqueólogos, hasta la Biblia.
Por supuesto no podían faltar Miguel León-Portilla, Eduardo Galeano, Enrique Florescano e incluso un historiador afín a la izquierda, cercano a López Obrador y a Morena, como Pedro Salmerón Sanguinés.
Pero sin duda sorprenden la cantidad de referencias a obras del historiador judío Yuval Noah Harari, tan de moda hoy, pero, sobre todo, en el capítulo 4, Salvajes, bárbaros y esclavos, el político tabasqueño retoma al antropólogo Roger Bartra, uno de sus principales detractores, y su libro El mito del salvaje.
La intención del libro
En su introducción, de apenas un par de páginas, López Obrador expone que la intención de Grandeza “es demostrar que los mejores principios éticos y la bondad que poseemos como pueblo y nación provienen de aquello que heredamos de las grandes civilizaciones del México prehispánico”.
Agrega que, “para comprobar esta hipótesis me apoyé en el trabajo de antropólogos, sociólogos, historiadores, arqueólogos y otros científicos sociales; así como de expertos en biología, física y astronomía....”, entre muchos otros especialistas, además de sus recorridos por comunidades indígenas.
Y agrega que la razón principal por la que escribió su libro, que cuesta 448 pesos en la FIL Guadalajara, es explicar cómo se concibieron, fueron penetrando y pretenden mantenerse prejuicios perniciosos e inhumanos en tanta gente y cómo han permanecido a lo largo de la historia de México.
“El estigma del masoquismo y del complejo de inferioridad fue impuesto por la invasión española, se mantuvo en el México independiente, lo retomó el afrancesamiento de la élite en el poder durante el Porfiriato y aún está latente en la escencia del pensamiento conservador de nuestros días: naco, chario, chinito, indio, pata rajada, indita, inculto, tonto, ignorante, maloiente (...) y otros epítetos más tienen como única explicación lo profunda que ha sido la colonización mental y la manipulación masiva, implantada por la oligarquía dominante en cualquier época”, sostiene el ex presidente mexicano.
También apunta que su intención es “refutar la historia inventada o tendenciosa basada, entre otras aberraciones, en atribuir a los pueblos indígenas de la Antigüedad supuestas prácticas de sacrificios humanos, de canibalismo y otros procederes de este tipo y, por el contrario, con pruebas y argumentos, dar a conocer y exaltar la grandeza de las espléndidas civilizaciones mesoamericanas que han mantenido a México como una potencial cultural en el mundo”.
hc
