Hace once años, Brenda Meza se sumó como estudiante a la primera escuela que enseñó a moldear plata en Torreón. Desde entonces su imaginario se volcó en piezas de joyería únicas que conformaron colecciones, algunas de ellas que incluso se quedaron en África, pues el viaje de retorno a casa después de unas vacaciones se suspendió y la diseñadora pasó la pandemia construyendo un nuevo discurso con artesanos que tallan madera y crean textiles en Mozambique.
Esta audacia y sobre todo el diseño de sus piezas llamaron la atención de los organizadores de “Original”, exposición que se presentará el próximo domingo en el Museo de Los Pinos, y donde se pondrá de manifiesto que la creatividad, no sólo la que han comprobado con creces los artesanos tradicionales, sino de los que emergen de las ciudades, pueden dar una nueva identidad al concepto de mexicanidad.
“De Coahuila estará un artesano que hace sarapes y nosotros de Torreón que hacemos joyería. Es un evento del Gobierno de México impulsado por la Secretaría de Cultura, la exposición se llama Original, es un encuentro de arte tradicional mexicano. A nosotros nos da mucho gusto participar porque en realidad consideraron obras que representan una muestra artesanal de todo el país pero sobre todo del sur, donde el arte textil es muy importante y es toda una tradición que hay que salvar”, comentó Brenda Meza.
A pesar de que la ciudad de Torreón es una de las más jóvenes del país, con 114 años de fundación, el movimiento de diseño de plata que emergió de la Escuela de Diseño y Manufactura de Joyería dio un impulso fuerte a los artesanos, algunos de los cuales lograron la especialización logrando confeccionar piezas de verdadero arte que reflejan la idiosincrasia lagunera.
Es por ello que Brenda Meza da las gracias a la Unidad Regional de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas, ubicada en la ciudad de Gómez Palacio, toda vez que ha logrado destacar estos esfuerzos para representar a la Comarca Lagunera en el escenario cultural nacional.
“Nos da muchísimo gusto que nos hayan considerado de esa manera. Yo soy egresada de la primera generación de la escuela, entonces tenemos once años con una empresa formalmente establecida. Los obstáculos con los que nos hemos encontrado, sobre todo al inicio, fue el crear una cadena de producción porque desde el primer día teníamos muy claro que formar un equipo de trabajo era la meta por la que teníamos que trabajar”, señaló.
En el equipo también colabora Mónica Escareño, jefa del taller y se encarga de la calidad de la producción porque cada una de las piezas se realiza cien por ciento a mano.
Ellas debieron iniciar sabiendo que en Torreón no existen proveedores de todo lo que requieren ni mano de obra capacitada, pero el insumo más importante, la plata, sí hay en abundancia, por lo cual arrancaron el taller y comenzaron con la inspiración de las piezas.
“Yo creo que la plata nos identifica como mexicanos, eso es algo súper importante. Supimos desde el principio que el color blanco que tiene este metal no lo tiene ningún otro en el mundo”, manifestó.
CALE