Varios años duró el debate acerca de cómo influirían los medios digitales y nuevos formatos de lectura, sobre el libro; según el director de Galaxia Gutenberg, Joan Tarrida, terminó por ser una polémica un tanto falsa, “una discusión solo para vender aparatos, no libros.
“La facturación de libros electrónicos, al menos en España, es de 3 por ciento; de nada se ha hablado tanto en el mundo como de ellos para acabar vendiendo ese porcentaje. Es un fracaso. En Galaxia Gutenberg todos los libros están en digital y en físico, y pienso que es el lector el que va a decidir en qué lo quiere leer”.
De paso por México para participar en el Hay Festival Querétaro, en especial en el programa Talento Editorial, quien fuera director de Publicaciones de los Juegos Olímpicos de Barcelona y durante casi dos décadas editor en el Grupo Bertelsmann, reconoce que los grandes competidores del libro y la lectura son las series de televisión y los teléfonos celulares.
“Cualquiera de nosotros pasa mucho tiempo en el teléfono celular haciendo cosas que, luego nos damos cuenta, son una tontería, y no tenemos tiempo de leer porque hemos pasado una hora viendo tuits, WhatsApp o páginas que tampoco eran necesarias. Creo que ese es el gran reto. El asunto es ver si es momentáneo o irá a más”, explica Tarrida, quien en 2010 se convirtió en el máximo accionista de Galaxia Gutenberg.
Más allá de cierta desconfianza hacia los nuevos medios porque al final no se sabe quién hace el filtro para el público, y por encima de la inmediatez de los medios digitales, los libros deben ofrecer solidez, “y eso va a ser necesario siempre, porque el buen lector siempre buscará ese texto que le permita hacer una reflexión profunda y reposada”.
Pez que se muerde la cola
En cuatro décadas dedicadas al libro, Tarrida ha logrado conocer algunas necesidades de los lectores contemporáneos, sin por ello ceder a la tentación a publicar solo lo que a ellos les llega a interesar, sino convencido de que, como sucede en muchos asuntos de la vida cotidiana, “al igual que se educa al paladar, hay que hacerlo con la lectura.
“Los buenos libros generan buenos lectores, y al revés: buenos lectores exigen buenos libros. Este es un pez que se muerde la cola, pero estoy convencido de que los lectores saben reconocer los buenos libros: si éstos desaparecen, aquellos también va a desaparecer. Esto nos pasa a todos: si nos acostumbramos a beber una cerveza que no es tan buena, al final encontraremos siempre una mejor”.
El editor acepta que durante la época de auge de las novelas de Dan Brown y de J. K. Rowling se dio el momento de mayor lectura en los últimos años, pero eso ya dejó de pasar, y ya no existen libros que se vendan por millones, “lo que en parte puede ser por las publicaciones pirata o porque el lector que leía para pasar el rato ahora lo hace con las series de televisión.
“Sí que es verdad que cuantos más libros de autores que venden salen en las librerías, más se vende todo. La gente, cuando más va a la librería, más compra”.
De ahí la necesidad de mantener una relación franca y abierta con los libreros y con los medios de comunicación, porque hacen mucho trabajo para permitir que los libros puedan llegar a los lectores, pero “también creo que el lector de editoriales como Galaxia Gutenberg es exigente, sabe lo que quiere y no lo puedes engañar. Hay un lector que espera que los libros estén bien hechos, bien corregidos, bien traducidos y que al final respondan a sus exigencias”.
El trabajo de ir en busca de los lectores no ha sido nada sencillo en estos siete años de independencia, reconoce Tarrida, porque cuando formaba parte de Círculo de Lectores, la narrativa y el ensayo se recibían del resto de las editoriales, por lo tanto no tenían necesidad de ir en su busca.
Gracias a ello, Galaxia Gutenberg ha logrado títulos como El triunfo del artista, de Tzevan Todorov, “un libro que él me entregó pocas semanas antes de entrar al hospital, en el que refleja la lucha entre los artistas rusos y el régimen soviético; podríamos pensar en él como su testamento”, y Vestidas para un baile en la nieve, de Mónica Zgustova, para el cual entrevistó a nueve mujeres que sobrevivieron al Gulag.
Joan Tarrida estará en el Hay Festival Querétaro mañana, donde participará en las conversaciones Bogotá 39: el Hay Festival y la edición independiente iberoamericana celebran la buena literatura y ¿Para quién editamos? ¿Quién nos lee? Nuevos y viejos lectores. Los públicos de la edición independiente.