Con documentos legales en mano, Erik Garza Treviño, representante legal deCarlos Reyes Maldonado, víctima de presunto despojo de un terreno de tres hectáreas y media ubicado a la orilla de la Carretera Nacional, en El Huajuquito, municipio de Santiago, hizo una cronología de cómo han sido ignorados por la autoridad.
Todo comenzó en 1990, cuando una persona identificada como José Luis Manllo Rodríguez le cedió el terreno a don Carlos con papelería emitida por la Notaría 90, en donde consta la adjudicación en propiedad del inmueble y el contrato de reconocimiento de adeudo con garantía hipotecaria promovida por Hugo Yáñez Ávila, representante de Inmobiliaria y Desarrollo Regiomontano.

En este documento figura el nombre de Graciela Leyva Castañeda de Rodríguez, quien manifestó tener un contrato de promesa de venta con obligación de compra, por lo que se ostentó como legítima propietaria.
A lo largo de 35 años, Carlos Reyes hizo crecer su negocio de molienda, vivero, locales y resguardo de caballos, pero para 2023 comenzó la amenaza de un despojo por parte de una inmobiliaria.
En junio de 2023, don Carlos denunció ante la Fiscalía de Justicia ser víctima de despojo, pues ya le habían quitado parte del predio, esto consta en la carpeta 102126/2023 que no se ha movido, no ha habido citatorios, ni respuestas.
Para protegerse de forma legal, en 2024 don Carlos estaba por promover un juicio ordinario civil de prescripción adquisitiva para tener la propiedad del predio, pero no prosperó porque le llegaron otros problemas.

En noviembre de ese mismo año, la Fiscalía General de Justicia aseguró el predio por denuncia de venta de droga en los locales de molienda, elotes y vivero, con lo cual don Carlos se vio obligado a salir del terreno. A la fecha su abogado argumenta que no tienen acceso a la carpeta UTM MTY 9449/2024.
Un semana después de esto, la Fiscalía liberó el predio y se lo entregaron a Inmobiliaria Ágora, que comenzó la destrucción de locales y rápidamente la construcción de una tienda de autoservicio y un café.
Se identifica a Dimitri Nicolás Hadjopolus Coindreau como representante de Inmobiliaria Ágora, encargada del desarrollo del predio, que podría tener un claro de 315 millones de pesos si se toma en cuenta que el metro cuadrado cuesta 9 mil pesos de acuerdo a los lugareños.
mrg