Don Florentino Hernández, de oficio obrero, construyó su casa con esfuerzo en Huitzila, Tizayuca. Aquí, ha vivido 14 años con su familia, pero ahora tendrán que desalojar pues la casa será demolida, así como otros ocho inmuebles más, para que el gobierno federal construya un paradero del tren México-Pachuca.
Con una gorra oscura, un chaleco a cuadros y una camisa azul claro, en la puerta de madera de su casa y a lado de su hija, espera un pago justo de su patrimonio, acorde al esfuerzo de toda una vida. Agrega que existe el compromiso de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano para cumplir con la indemnización.
Un camino de terracería lleva a la casa de don Florentino, que es de una sola planta, sin acabados, a la vista block, varillas y láminas. Destaca la construcción de un segundo nivel sin concluir. Los camiones y volteos, que despejan el derecho de vía para el proyecto ferroviario, avanzan lentamente hacia las viviendas.
“Tanto tiempo estuvimos trabajando para tener esto. No es fácil volver a empezar”, advierte don Florentino, quien afirma que las autoridades federales aún no informan sobre la fecha del desalojo inminente ante el avance del proyecto ferroviario.
En la comunidad de Huitzila es común escuchar el estruendo de la locomotora, entre polvaredas. Las vías atraviesan esta comunidad de 5 mil habitantes y mil 867 viviendas, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Hay escuelas y su parroquia rinde culto a San Francisco de Asís.
Al señalar que no se oponen al nuevo proyecto ferroviario, don Florentino y su familia tampoco se acostumbran a vivir con la preocupación de que pronto tendrán que abandonar su hogar, esa angustia constante. “Ni duerme uno, ya que pronto vendrán para desalojarnos”, cuenta.
La hija de don Florentino agrega que las autoridades federales llevarán a cabo una reunión para informar sobre la fecha de la reubicación, pero advierte que antes de ello les deben de indemnizar. Apunta que las autoridades federales ofrecieron un departamento en el Estado de México, cuyas dimensiones son muy reducidas, por lo que no aceptaron.
Mejores condiciones
En otro extremo de Huitzila, Martín Arrieta Flores se ve contento, pues de habitar dos cuartos que invaden derecho de vía del tren México-Pachuca, después del 15 de diciembre vivirá junto con su familia en un departamento ubicado en el fraccionamiento Héroes Tizayuca, como parte de un programa de vivienda digna.
“Nos llegó la suerte”, resalta el hombre de oficio albañil y sepulturero, quien destaca que la reubicación significa una mejor vida para sus niños, pues hasta el momento carecen de un patrimonio propio. “Estamos agradecidos porque nos están echando la mano”. Por tanto, se dice conforme con la reubicación y a la vez agradece el apoyo federal.
Martín Arrieta, junto con sus dos niños y su esposa, lleva 15 años viviendo junto a las vías, por lo que no es fácil dejar esta propiedad. “En ese cuartito falleció mi madre. Es doloroso dejar algo que es nuestro y nuestras raíces”.
Ante la reubicación, ya hay casas que lucen abandonadas, como en obra negra, luego de que se llevaran los muebles y retiraron herrerías, puertas y ventanas.
Particularidades
La estación Tizayuca Temascalapa estaría sobre la vía OtumbaTizayuca, según los planos de la Defensa Nacional que dan como referencia Cemex, Agroquímica Tridente, Grupo Gasolinero TH y Sociedad Cooperativa Trabajadores de Pascual Boing.
El área administrativa estaría integrada por taquilla, seguridad, jefe de estación, sala de juntas, comedor y planta de emergencia. En tanto, estaría formado por lobby, módulo de información, vestíbulo principal, sala de espera, paquetería y mensajería, lactancia, taxis, primeros auxilios, cuatro locales, objetos perdidos, sanitarios, plaza cívica, juegos infantiles, bici estacionamiento y estacionamiento público.
Sin embargo, al cancelar la construcción de una estación en Huitzila para evitar mayores daños se planea edificar un paradero en la entrada de la localidad.
