Acodemis, asociación civil que trabaja en la prevención y detección de VIH, denunció que tanto el gobierno federal como el estatal han dejado a un lado el apoyo a las organizaciones que trabajan en materia de salud sexual.
Abel Quiroga, fundador de este colectivo, señala que en años anteriores la Federación, por medio del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIHy sida (Censida), financiaba a centros comunitarios de detección de enfermedades de transmisión sexual (ETS), como La Casita.
Sin embargo, desde el inicio del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador la ayuda terminó, ante la creencia de que las organizaciones civiles son corruptas e intermediarias de los apoyos del gobierno.
De la misma manera, el gobierno del estado, por medio de la Secretaría de Salud, cesó el abastecimiento de insumos (condones, lubricantes, pruebas rápidas, etc.) a estas asociaciones desde 2017.
“El gobierno estatal no nos ha dado pruebas, no nos ha dado condones. Hay una falta de visibilidad a la sociedad civil; ningún nivel de gobierno está enfocado en la epidemia de VIHpara apoyar a la comunidad”, lamenta.
A pesar de ello, los centros comunitarios han buscado distintas formas de financiar su labor, logrando una gran efectividad, mayor incluso que la de Gobierno pese a contar con una gran infraestructura estatal.
“Nosotros estamos encontrando a las personas (con ETS) con menos recursos que el estado, porque tiene que invertir millones de pesos en compra de insumos, pagos de personal, para detectar a las personas. Nosotros con menos recursos tenemos mayor efectividad”, dice Quiroga.
Únicamente en 2018, la Secretaría de Salud aplicó 56 mil 558 pruebas, de las cuales logró identificar a 303 personas seropositivas en todo el estado. En tanto, las asociaciones Acodemis, Comac, Chenac y Explora T lograron diagnosticar y canalizar para su atención a 146 en sus respectivas instalaciones, donde además se imparten talleres de educación sexual.