Claudia Ramírez Lomelí debuta en la literatura fantástica con El Príncipe del Sol (editorial Planeta). Una trama con personajes fantásticos que se mueven entre el sol y la luna, que en este caso se confrontan: luz-oscuridad. La historia parte de Fenrai, la tierra del sol, donde no se conocía la noche o el frío, hasta que todo se hizo negro. Emil, el príncipe heredero de la corona del sol, en ausencia de su madre, deberá asumir el trono, y Elyon, su mejor amiga, lo convence de emprender un viaje arriesgado. Todo con tal de evitar los planes siniestros del reino de la luna. La autora regiomontana también conocida como ClauReadsBooks presentará esta novela hoy en la FIL, a las 13:30, sala C.
¿Cómo se origina "El príncipe del Sol"?
Fue de mis años de universidad hace como cinco años. A mí siempre me ha gustado la fantasía, siempre que leo, cuando veo series, caricaturas, todo, siempre me voy por la fantasía. Entonces en mi cabeza desde los 13 años he estado creando historias de fantasía, unas no muy buenas, otras buenas, y en mis últimos años de universidad fue que se me ocurrió hacer algo con sol y luna. Lo único que yo sabía era que quería crear una historia de fantasía usándolos como elementos principales.
Es como una metáfora muy interesante, luz oscuridad, sol-luna, ¿cómo la encauzaste para crear este universo?
Quise hacer cosas contrarias y lo primero que se me ocurrió, creo que las principales ciudades van a ser la ciudad del sol y la de la luna, que tienen un nombre. Y son enemigas por una guerra que ocurrió hace un milenio y quise hacerlo como más profundo, inventando un sistema de magia, el mismo sistema de magia para todo el reino, pero que funcionara diferente para el sol y la luna. Los ciudadanos de la nación del sol tienen poderes afines al sol, como los son fuego, luz, y los habitantes del reino de la luna tienen poderes más a afines como lo es el agua, porque la luna afecta mucho en la marea. Y los del sol piensan que los de la luna son personas oscuras y malvadas, y los de la luna igual, pues los del sol son sus enemigos naturales. Entonces como que cada nación tiene mucho desconocimiento de la otra, y para eso es la historia, para irse conociendo cada nación: las costumbres, cómo ven a los otros, cómo se ven ellos mismos.
¿Cómo moldeaste a Elyon y Emil, los protagonistas?
Como he leído tantas historias quise hacer personajes que sé que me iban a caer bien, porque ya sé qué tipo de personaje odio, qué tipo de personaje puedo llegar a amar o que me guste. De ahí nacieron. También me encantan las historias de fantasía donde hay un príncipe, y pues dije mi protagonista tiene que ser príncipe. Entonces la relación de amistad entre los protagonistas también me inspiró de que cuando leo un libro donde se da una amistad muy fuerte, pues me gusta mucho, porque yo siento que la amistad se deja muy de lado en los libros, y se enfocan en el amor. Y quise reflejar eso en mis protagonistas, que fuera una relación de amigos, por sobre todas las cosas quise crear contrastes, si Emil es valiente, pero él mismo no lo sabe, y Elyon es arriesgada, y los dos se complementan.