En México, 13 de cada cien personas que perdieron familiares, su vivienda, fueron rescatadas de los escombros o entraron en crisis con los temblores del 19 de septiembre, se “retraumatizaron” con el simulacro realizado esta mañana, aseguró Alfredo Whaley, especialista del Instituto Nacional de Psiquiatría.
“El trauma no se supera ni se olvida. Las situaciones traumáticas del terremoto de 1985 y de 2017 se quedan albergadas en la memoria. Situaciones como escuchar las sirenas de las ambulancias y la alerta sísmica reviven esos momentos de duelo, de perdidas, de estrés entre personas afectadas por esos sismos o cuya personalidad es vulnerable”, explicó el psiquiatra tras precisar que dicha cifra es un estándar a nivel internacional.
El especialista agregó que las secuelas de dicho estrés pueden durar hasta un mes y, si no se supera, desencadenar en un estrés postraumático.
“Hay traumas a corto y largo plazo. La mayor parte se quedó en la etapa aguda que dura un mes pero también en algún sector puede duran más de tres meses y convertirse en entres postraumático, que ya implica reacciones más crónicas. De cien personas, por ejemplo, ocho o hasta 13 tienen estrés postraumático”.
Los simulacros, aclaró, no es que sean negativos. Es conveniente realizarlos porque forman parte de una cultura de sensibilidad y prevención ante los desastres.
“Esta fecha o el mismo simulacro te hace recordar una emoción. Y la memoria va asociada siempre con la emoción. El trauma se queda ahí toda la vida como un disco duro. Siempre que recuerdes tendrás la sensación y eso significa retraumatizarte temporalmente”.
En ciertos centros hospitalarios, comentó, se registraron algunas crisis de pánico sin mayor complicación, todo indica que muchos estaban informados y preparados.
No obstante, se debe de considerar a aquellas personas que volvieron a revivir el trauma, ya pasó un mes y siguen con signos de estrés, como no poder dormir. “Se requiere puntual atención y tratamiento con antidepresivos”, alertó.
nerc