Las restricciones para contener el virus covid-19, poco a poco acaba con los negocios de la zona conurbada, consideró, José Luis Ortega, empresario dedicado a la venta de vinos y licores.
Dijo que de sirve que vengan vacacionistas, si no pueden disfrutar del consumo, y lamentó que no exista unión entre los comerciantes, porque la solución estaría en no pagar impuestos, si es que continúan las imposiciones de cierres.
"Es caro todos los días porque pagas luz, agua, renta y además a empleados, así que la economía no está para andar tirando muchas cosas; la verdad es no que estamos bien unidos, porque si el comercio estuviera unido, diríamos, ahora no te pago impuestos", destacó.
Señaló que ha sostenido diálogo con la Cámara Nacional de Comercio, a fin de que este organismo intervenga ante la Secretaría de Salud, para aminorar las restricciones de horario.
Con los nuevos lineamientos a causa del aumento de contagios los negocios son los más afectados porque deben disminuir sus horarios de servicio.
"No nos hemos podido recuperar, pero qué va de la gente que viene de fuera que antes nos compraban y nos ayudaba a tener, pero ahora eso es difícil de conseguir”, aseguró el entrevistado.
Dijo estar de acuerdo que en que las autoridades involucradas en la estrategia de salud para contener el virus, realicen acciones pertinentes, pero endurecer todavía más los horarios en el comercio, eso es lo que no permite avanzar, refirió.
“Los negocios de vinos y licores se han visto afectados por las restricciones, sobre todo en la venta de alcohol el fin de semana, y muchos no nos hemos podido recuperar económicamente por causa de los decretos establecidos”, señaló.
El semáforo epidemiológico desfavorece en sus expectativas de ventas y son un golpe fuerte cada fin de semana para la economía de sus negocios, porque ni ventas tienen.
"El sábado tenemos que cerrar a las 3 de la tarde y el día domingo tenemos que cerrar la cortina, ya que el día sábado, es cuando mayor afluencia se tiene y es cuando a la mayoría les pagan", enfatizó.
Confió en que finalmente exista una solución y con ello obtener el respaldo para créditos o en su caso, descuentos en los pagos de los servicios básicos y disminuir esos gastos, que sin ventas, son excesivos y difíciles de solventar.