Convierte el baño en tu lugar favorito y no solo en un espacio más de tu casa. Éste debe ser tu lugar de retiro cuando no quieras ver a nadie y sólo busques un lugar para relajarte.
Comienza por agregar toallas de algodón que sean suaves, te sugerimos buscar tonos que combinen con el color de tu baño y si ninguna te convence las de tonos blanco o bicolor (con rayas blanco y azul) se ven bien en todos lados.
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Después, deshazte de esos recipientes de plástico a los que se les rompen las tapas a los dos días de usarlo y vacía tu shampoo y acondicionador en recipientes de vidrio o plástico claros que tengan tapa rosca. Esto hará que todo se vea más elegante y delicado dentro de la regadera que usas todas las mañanas.
También puedes agregar una charola en tonos metálicos para que puedas acomodar tus productos favoritos como cremas para la cara, pasta de dientes, cepillo e incluso joyería.
Como toque final, cambia tu antigua y deshilachada toalla de manos por una mucho más esponjosa y con pequeños detalles que pueden ser bordados o estampados.
mrf