Los diputados de la comisión especial para el seguimiento de los recursos federales destinados a la Línea 12 del Metro aprobaron su segundo informe de trabajo y en él recomendaron tanto a la PGR como a la PGJDF investigar los probables delitos y, en su caso, proceder contra los responsables de las fallas técnicas e irregularidades en el proyecto.
La comisión legislativa suprimió, sin embargo, los nombres de Marcelo Ebrard y Mario Delegado como funcionarios expresamente señalados como presuntos responsables de las anomalías que mantienen fuera de operación once estaciones de la llamada Línea Dorada.
No obstante, el diputado Ricardo Mejía, vicecoordinador de Movimiento Ciudadano (partido que postuló a Ebrard como candidato a una diputación plurinominal), descalificó el informe y dijo que el grupo de trabajo actúa como una "comisión de consigna".
El perredista Carlos Reyes Gámiz cuestionó las atribuciones de la comisión especial para hacer recomendaciones y denunció una presunta intención de "descarrilar" a la izquierda como opción electoral.
Por separados, el priista Abel Guerra afirmó que el argumento del golpeteo político "está fuera de lógica" y el panista Fernando Rodríguez Doval lamentó que los ex directores del STC y de Proyecto Metro hayan declinado asistir a la comisión especial para contrastar sus versiones de los hechos con la de Marcelo Ebrard.
