ElInstituto Nacional Electoral (INE) mantuvo los rebases de topes de gasto decampaña en la elección de Coahuila, lo que deja abierta la posibilidad paraanular el triunfo del priista Miguel Riquelme.
Por lo que elTribunal Electoral será el que tenga la última palabra para avalar loscriterios aprobados de último minuto por el Consejo General, los cuales nopermitieron que el cálculo se redujera lo suficiente para evitar el rebase.
En el caso delPRI, a pesar de que se redujeron los gastos no reportados de representantes decasilla y de spots no reportados, la introducción de 648 mil pesos de gasto enFacebook y un reajuste de 350 mil pesos por la aplicación del prorrateo generóque se mantuviera el rebase.
Mientras, enel caso del abanderado del PAN, Guillermo Anaya, la decisión de eliminar elcosto de encuestas de salida del gasto de campaña que representaba un gasto de1.2 millones de pesos no fue suficiente para librar el tope.
Luego de 10horas de sesión, el consejero Ciro Murayama reveló que de acuerdo con “cifraspreliminares”, el gobernador electo gastó más de millón y medio de lopermitido, mientras que el entonces candidato del PAN superó el tope con solo997 mil pesos.
“Son datospreliminares, porque acabamos de votar, pero estamos hablando de un rebase de8.27 por ciento de la coalición encabezada por el PRI, y que toca 5 por cientopor arriba en el caso de la alianza encabezada por el PAN”, dijo.
Por lo que sibien en los primeros dos dictámenes emitidos por la Unidad Técnica deFiscalización el gasto se mantenían por debajo del tope, los criteriosaprobados por la comisión dispararon el gasto no reportado, lo que generó unrebase de 31 por ciento en el caso de Riquelme, y de 26 por ciento para Anaya.
Al respecto,el representante del PRI ante el INE, Jorge Carlos Ramírez Marín, acusó que lasdecisiones que se adoptaron no permitieron que hubiera claridad en los montosde las sanciones, ni en los rebases que aprobaron minutos antes.
Por lo queconfió en que el Tribunal revierta las decisiones adoptadas por 7 de los 11consejeros, en especial, considerando que los partidos no fueron notificadoscon anticipación.
“Fue unasesión llena de irregularidades en cuanto a la incertidumbre que se genera”,agregó.
Ramírez Marínestimó que con las modificaciones, Riquelme quedaría por debajo de 10 porciento del rebase de los topes, “lo que demuestra que este fue un procesototalmente desaseado por estas últimas sorpresas para dejar que sea el tribunalel que decida”.
La sesión de ConsejoGeneral terminó sin claridad en el impacto real que tendrán en las sancionescontra los partidos por las irregularidades detectadas en las campañas deEstado de México, Coahuila, Nayarit y Veracruz.