Tras una corta agonía, el menor que fue atropellado junto a un grupo de jóvenes quienes realizaban una procesión en la colonia Tancol, murió en las instalaciones de un centro hospitalario particular en donde recibía atención médica.
Debido a las múltiples lesiones tras ser prensado por el vehículo y los barrotes de contención, "Manuel", no soportó las lesiones, agravándose la situación legal para el conductor responsable.