Las fiestas clandestinas, en donde el común denominador es la venta de alcohol adulterado, se han vuelto populares en León, en especial en los linderos del municipio y colonias populares según reveló a MILENIO Francisco Arenas Hernández, director general de Fiscalización y Control del ayuntamiento leonés.
En lo que va del año, la Dirección de Fiscalización ha intervenido y evitado al menos ocho fiestas clandestinas en las que se consumía alcohol adulterado, cervezas, y las famosas “aguas locas”; esta cantidad es similar a las que se llegaron a detectar el año pasado en la ciudad.
De acuerdo con Arenas Hernández, la difusión de estos eventos se realiza con mayor frecuencia a través de las redes sociales; de las ocho que se han detectado al menos cinco, la convocatoria ha sido por estos medios electrónicos, en donde incluso dijo que la metodología de operar es brindándoles un código a quien decida acudir, sin la necesidad de una pulsera o un boleto de acceso antes de ingresar a ellas.
“A través de las redes sociales que es la manera de invitar y que en muchas ocasiones el cobro no se hace ahí en la fiesta, lo hacen con anticipación y de control por pulseras”.
Las fiestas han sido detectadas principalmente en zonas de la salida a Silao, colonias populares de la ciudad, la más reciente en la colonia El Coecillo, mismas en las que se decomisa la bebida y se lleva a la Dirección de Fiscalización, en donde a la fecha existe una cantidad no contabilizada de cervezas, aguas locas en botellas de refrescos y garrafones de 20 litros para agua, mezcal en garrafas y cubetas, así como botellas de tequila.
Entre los productos almacenados en las oficinas de la dependencia existen bebidas decomisadas el año pasado, pero ante el espacio insuficiente para resguardarlos, en este mes se estarán destruyendo.
“Este año han sido diferentes, una fiesta en donde se dieron las famosas aguas locas, de un mezcal que no reúne los requisitos para su venta al público, que no estaba adulterado, pero no tenía sello de garantía, ni tenía el holograma, que últimamente también se ha recogido pulque, que son las garrafas.
- ¿Qué se hace con el producto, se destruye?
"Por lo regular lo hacíamos hace unos años, lo que tenemos es el acumulado de dos años, la cantidad exacta en cuanto número de piezas no la tenemos cuantificada, pero es bastante, es imposible tenerla en ese espacio”, refirió.
Tan sólo el año pasado en una fiesta clandestina se decomisaron 3 mil 2 cervezas, 140 botellas de ron, y 75 botellas de tequila, esta ha sido hasta ahora la fiesta con el mayor decomiso de bebidas que se ha dado a lo largo de los dos años que va de la administración.