La ex fiscal venezolana Luisa Ortega Díaz afirmó que fue presionada por el gobierno de Nicolás Maduro para acusar y buscar la condena del líder opositor Leopoldo López a 14 años de prisión bajo cargos de haber organizado una manifestación en Caracas en 2014, que derivó en hechos de violencia y causó dos muertes.
"Me presionaron para que dijera que el autor (de los homicidios) era Leopoldo", confesó la ex fiscal a la emisora colombiana Blu Radio. Al ser indagada sobre quién la presionó, respondió: "Diosdado Cabello", quien es considerado el número dos del chavismo y actualmente es diputado en la Asamblea Constituyente
Ortega Díaz oficializó su divorcio del oficialismo el año pasado, cuando se opuso a la celebración de una elección de una Asamblea Constituyente, una instancia desconocida también por la oposición. La asamblea destituyó luego a la fiscal para reemplazarla por el oficialista Tarek William Saab.
López fue condenado a trece años y nueve meses de prisión en septiembre de 2014. Sin embargo, el juicio estuvo envuelto en la polémica porque posteriormente fueron identificados los autores de los homicidios, quienes eran funcionarios de la policía científica adscrita al Ministerio del Interior y carecían de vínculos con López.
Adicionalmente, uno de los fiscales acusadores de López, Franklin Nieves, decidió exiliarse meses después y denunció desde Estados Unidos que había sido obligado a manipular las pruebas para poder incriminar al dirigente opositor.
La esposa de López, Lilian Tintori, pidió su liberación a través de un mensaje en Twitter. "Leopoldo López ya tiene 4 años injustamente preso. Es inocente ¡Exigimos su libertad plena!", escribió.
Por su parte, el partido Voluntad Popular (VP), al que pertenece el líder opositor, exigió la anulación del juicio.
"Con la declaración de Ortega Díaz una vez más queda en evidencia la ausencia de independencia y autonomía de poderes en Venezuela y que nuestro sistema de administración de justicia, en todas sus fases, está secuestrado por la dictadura, lo cual tenemos el compromiso inquebrantable de cambiar y reconstruir", señaló la formación en un comunicado.
El partido consideró a López como "el liderazgo más temido por la dictadura chavista-madurista", al subrayar que durante su carrera política fue víctima de una "persecución" que incluyó nueve años de inhabilitación política (2008-2017) y su posterior condena.
Numerosos gobiernos y organizaciones de derechos humanos internacionales consideran a López como un prisionero político, pero Maduro ha insistido en calificarlo como un "monstruo" y un "asesino".
jamj