En una rueda de prensa, el alguacil del condado de Las Vegas, Joe Lombardo, dijo que el número de víctimas mortales por el tiroteo perpetrado durante un concierto de música country aumentó a 59.
El alguacil añadió que el autor no solamente tenía otras 18 armas en su poder, sino también explosivos y otros dispositivos que están siendo analizados y que guardaba en su casa de la localidad de Mesquite, también en Nevada.
Lombardo dijo que los investigadores están enfocados en cuatro escenarios principales del crimen: la habitación del piso 32 del hotel Mandalay Bay desde donde disparó Paddock, el lugar donde se celebraba el concierto, la casa del presunto autor en Mesquite y otra propiedad que tenía a su nombre en el norte de Nevada.
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Así mismo, confirmó que también hay abierta una investigación sobre ella para dilucidar si ayudó a Paddock a planear el ataque, del que ya han descartado que tenga conexiones con el terrorismo internacional.
Por otra parte, detalló que el nombre de las víctimas no serán dados a conocer públicamente por respeto a las familias.
Afirmó que durante el tiroteo ningún elemento de seguridad fue herido y que todas las unidades actuaron inmediatamente para atender a las víctimas y heridos y adelantó que el número de muertos podría aumentar.
Por su parte, Steve Sisolak, el comisionado del condado de Clark, al que pertenece Las Vegas, agradeció en la misma rueda de prensa el apoyo ciudadano, ya que "hay filas con una espera de seis a ocho horas" en todos los centros de donación de sangre de su jurisdicción.
En tanto, las autoridades también informaron que se les brindó refugio temporal a las personas que se alojaban en los hoteles aledaños a la zona y que fueron desalojados por medidas de seguridad.
JOS
