Dylann Roof, acusado de matar en junio del pasado año a nueve feligreses afroamericanos en una iglesia de Charleston, en Estados Unidos, fue declarado culpable del crimen, por lo que será condenado a pena de muerte o cadena perpetua.
 
 En la fase inicial del juicio, los fiscales acusaron a Roof de ejecutar un crimen planeado con frialdad y perpetrado tras compartir unos 30 minutos con los 12 feligreses que rezaban ese día en la Iglesia Africana Metodista Episcopal (AME) de Charleston.
TE RECOMENDAMOS: Viví para contar lo que pasó: testigo de masacre en Charleston
"Apretó el gatillo de su (pistola) Glock .45 más de 70 veces esa noche. En más de 60 veces impactó a los feligreses", dijo el fiscal Jay Richardson a los jurados cuando inició el juicio.
Richardson explicó que Roof engañó a los feligreses, que creyeron que había acudido a rezar y que era "inofensivo". "No tenían ni idea del corazón frío y lleno de odio que tenía", apuntó.
El abogado de Roof, David Bruck, no quiso discutir los detalles de la matanza y centró su estrategia en pedir a los miembros del jurado que reflexionaran sobre los motivos que llevaron al joven a perpetrar los asesinatos para que no lo condenen a muerte.
 
 Roof, de 22 años, dejó escrito un manifiesto en el que reconocía que su formación ideológica estuvo inspirada por textos supremacistas y en su perfil de Facebook tenía símbolos del "apartheid" (régimen de segregación racial sudafricano). 
AFC
 
	