El gobierno parece insinuar un nuevo límite de tiempo para por fin terminar la negociación con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación o al menos terminar las movilizaciones: el principio de clases. Eso filtran por todas partes, eso prometieron a los empresarios.
Supongo que la decisión de la Corte de ayer sobre la evaluación ayudará, por lo menos, a centrar la discusión.
Porque los pendientes se acumulan y los rezagos son enormes.
Ayer, el INEE y la Unicef presentaron el panorama educativo de la población indígena. Para deprimir a cualquiera.
Cito: Los estudiantes hablantes de lengua indígena (HLI) se hallan presentes en todo el Sistema Educativo Nacional, pero su presencia disminuye conforme avanzan los grados y niveles escolares. En media superior, mientras el porcentaje de asistencia en la población total es de 74.8 por ciento, en la población indígena es de 65.2 por ciento y en los estudiantes HLI es de 58.2 por ciento.
Solo en 60 por ciento de escuelas con alumnos y docentes HLI, los docentes hablan las mismas lenguas que los estudiantes. Las condiciones materiales y la infraestructura en el servicio educativo indígena presentan carencias importantes; por ejemplo, en las primarias indígenas, 24.7 por ciento no dispone de baños, 28.9 por ciento no cuenta con mobiliario para docentes en al menos un aula, 21.2 por ciento no cuenta con mobiliario para al menos un alumno, y 18.1 por ciento tiene techo de materiales no durables.
Dos de cada 100 estudiantes de primaria general tiene dos o más años de rezago (extra edad grave), mientras que en las primarias indígenas, son nueve de cada 100.
El mayor porcentaje de alumnos con nivel de logro por debajo del básico en la prueba Excale (2012) se encuentra en primarias indígenas. En Español, 75 por ciento se ubicó en este nivel, y en Matemáticas fue 65 por ciento. En comparación, en las escuelas urbanas públicas los porcentajes fueron 37 y 36 por ciento, respectivamente.
Así la situación de la población más vulnerable del país.
Así que, pues ahí sigan conversando y prometiendo y repartiendo. Total. Qué son 4 millones de estudiantes indígenas.
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