En medio de la tensa negociación del Brexit, el Reino Unido (RU) y la Unión Europea (UE) han provocado incertidumbre en los mercados internacionales. Esto ha llegado a México, país que a pesar de la lejanía geográfica es comercialmente atractivo para la nación inglesa.
El Brexit impactará de manera negativa en la economía mexicana, pronostican algunos analistas, pues el peso es la moneda más líquida de los mercados emergentes, con un intercambio de 135,000 millones de pesos y, por tanto, la más sensible al pánico internacional. Pero la suerte no está echada, para Duncan Taylor, el embajador del RU en México, “es el lugar ideal para invertir y, por supuesto, para crecer”.
Desde el año 2000, existe un Tratado de Libre Comercio entre México y la Eurozona (TLCUEM), que en el primer trimestre de 2016 dejó una derrama económica en las exportaciones de 788,600 millones de dólares (mdd) y 488,600 mdd en las importaciones. Duncan Taylor considera que ambas situaciones, el Brexit y el posible “Mexit” (la salida de México del TLCAN), le darían la oportunidad a ambos países de “establecer vínculos en todas las áreas de crecimiento económico, en especial, en el sector energético y de manufactura como el automotriz”.
Cuando se le cuestiona si RU, el octavo mayor inversionista de México, hará recortes presupuestales en sus inversiones en México, él sin titubear responde: “en los próximos años subiremos en el ranking. Con la actual Reforma Energética, tendremos más presencia tanto en la cadena de suministros del sector de hidrocarburos, así como en el de exploración de aguas profundas”.
Los dos países se han beneficiado del comercio, una derrama que oscila en más de 170,000 mdd al primer trimestre de 2016. Pero antes de que el RU salga definitivamente de la UE, ”seguiremos trabajando de la mano del gobierno mexicano con los aranceles que actualmente gozamos”, dijo.
Prueba de ello, es el Año Dual de México y RU que, al menos en 2015, se tradujo en la consolidación de avances en materia económica, “duplicando el comercio bilateral a 7,000 mdd”, comentó Taylor. Pero una vez que el RU salga de la UE, “se tendrían que renegociar puntos clave del TLCUEM con México”, dice Taylor. “Sin duda será un plan más ambicioso que beneficie a los dos países”.
Al menos en el sector turístico, según cifras de la Embajada del RU en México, el año pasado se registraron medio millón de visitantes ingleses en nuestro país. En la contraparte, alrededor de 85,000 mexicanos visitaron Gran Bretaña. “Eso significa que México es un mercado potencial en este sector, pero no de prioridad para nuestro gobierno. Y eso tiene que cambiar con campañas y alianzas estratégicas que fortalezcan y ofrezcan nuevas rutas para ambos visitantes”, finalizó el embajador.