El líder de la sección 22 de la CNTE, Rubén Núñez, negó que sea un criminal, y dijo que su único delito fue defender la educación, al agradecer el apoyo de sus aliados, los padres de familia, de las autoridades municipales y ejidales que se sumaron a su lucha y permitieron su excarcelación.
En su domicilio particular, ubicado en el municipio de Río Grande, donde se reunió con sus hijos y sus nietos y con quienes festejó con un pastel, dijo que no desistirá por lo que la lucha continuará.
Adelantó que iniciará un recorrido por la Ciudad de México, donde agradecerá el apoyo que ha recibido de los profesores de Chiapas, Michoacán, Guerrero y los compañeros del norte, quienes lo visitaron en el penal de Hermosillo, Sonora.
"No somos delincuentes, no hemos vendido el movimiento, no somos rateros, no somos asesinos, ni mucho menos hemos caído en la corrupción que quede bien claro, por eso les pido que se sientan en confianza al lado de Rubén; les refrendo mi compromiso de seguir en la lucha porque salí fortalecido".
AA/REPL
