Los ojos del mar es una verdadera joya que se estrena en el Festival de Guadalajara. ¿Joya? En este espacio es necesario justificar semejante afirmación, sobre todo porque estas cosas se dicen mucho pero suelen significar muy poco. Para comenzar, Los ojos del mar es una joya porque Hortensia, la protagonista, es encantadora. Y el director José Álvarez ha tenido la inteligencia de dejarla narrar esta aventura. Hortensia quería ser pescadora. Un revés en la infancia la alejó de este empeño, pero ahora tiene que volver al mar para cumplir la voluntad de otra niña que perdió a su padre durante una tormenta. Hortensia trae consigo una cajita de recuerdos que ha ido pintando como si fuese un exvoto.
A pesar de que hay en estos personajes la conciencia de haber sido maltratados por la vida, José Álvarez no se concentra, como hace el mal cine mexicano, en la tristeza de estos hombres y mujeres. Más bien los ilumina: “a nadie le gusta el dolor. Es lo que nos ha tocado vivir”, dice Hortensia. Y baila en éxtasis. Hortensia es esta sirena ya entrada en carnes; una mujer a quien la cámara desnuda pero no para exhibir un cuerpo que está lejos de la sensibilidad impuesta por la moda, sino para mostrar su exuberancia: el erotismo de una mujer que simboliza el mar en el que desaparecieron seis hombres, seis náufragos a quienes Hortensia lleva una ofrenda: esta cajita con el espejo que sirve para narrar, para dar cuerpo a todos esos recuerdos y ese llanto. El amor que al náufrago se le quedó en tierra.
Los ojos del mar es una joya precisamente porque toca grandes temas de la literatura occidental: el naufragio, la profundidad, la extensión marítima, un chamán que calma la tormenta; todo aquello que hay en la aventura que ofrece sentido a vivir. Decían los marinos portugueses que navegar es mejor que vivir. Y así lo confiesa otro personaje de tamaño rulfiano: “me han dicho que me cuide, que ya deje de venir al mar pero ésta es mi vida. Y puto el que se raje”. Los ojos del mar es una joya porque tiene la fuerza de un cuento folclórico, de un mito con sirenas y espíritus que habitan selvas, lagunas y puertos. Es como uno de esos cuentos populares que el romanticismo transformó en gran literatura.
Los ojos del mar. Dirección: José Álvarez. Guión: Diego Rivera Kohn, José Álvarez. Con Hortensia Pérez Rocha, Demetrio Meza, Noé González. México, Alemania, 2017.
@fernandovzamora