Ésta no es una subasta convencional. Anónimo —como su nombre adelanta— transforma el formato tradicional de las pujas de arte: el comprador no conoce la identidad del artista que creó la obra que está a punto de adquirir hasta que se concreta la transacción.
Antes de la subasta, realizada desde 2015 en Miami durante la feria de arte Art Basel, las obras son exhibidas. Dotados sólo con una lista de artistas participantes, los potenciales compradores disponen de algún tiempo para inspeccionar las piezas.
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Un porcentaje de las ganancias fue destinado a ayudar a damnificados por los terremotos de septiembre pasado en México a través de la fundación #LevantemosMéxico y a los afectados por el huracán María en Puerto Rico, gracias a la organización Boys and Girl Clubs.
Según sus creadores, este formato “promueve la adquisición de arte como un proceso libre de ideas preconcebidas, motivado sólo por la conexión que genera una pieza”.
La edición 2017, que recaudó 128 mil dólares, se realizó el pasado 8 de diciembre con piezas creadas ex profeso por 22 artistas. Cada obra tuvo un valor de salida de 5 mil dólares
La próxima edición de Anónimo —anunciaron los organizadores— se realizará en la Ciudad de México en septiembre de 2018.
Éstas son algunas de las obras subastadas en la edición 2017 de Anónimo:
[Mundo raro, de José Dávila]
[Cállate y sigue nadando, de Ivan Krassoievitch]
[Sistema podrido, de Cristian Franco]
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